Una playa ruda y divertida

Cuando hacemos referencia al Caribe, como el mar y sus islas, inmediatamente pensamos en fortaleza. Cuando en mi mente hago referencia a Playa Caribe, me vienen a la mente sus fuertes olas y el intento de bañarme en ella hace unos años. Este lugar conjuga dos características que podrían ser disímiles y que no lo son: es una playa ruda y divertida. Mira las fotos y vive lo que vivo en #MasAllademiCalle

Sus olas son fuertes y tiene un hermoso entorno verde

Playa Caribe es una pequeña costa ubicada entre dos acantilados entre las muy concurridas Guayacanes y Juan Dolio, lugares de esparcimiento para bañistas de República Dominicana y del mundo.

Es un litoral que es usado para surfear y para preparar fiestas de música electrónica en un ambiente próximo a la ciudad y cerca del aeropuerto de Santo Domingo y justo al lado de la Autovía del Este.

En mis tiempos de reportero en el Canal 2 de la televisión nacional, visité esta costa como parte de la fiesta de Navidad de la empresa. Para esa ocasión nos hospedamos en el hotel que existía a un costado de la playa y que ahora permanece abandonado.

Aún así este litoral es visitado por pequeños grupos de visitantes, como muestran estas imágenes que hicimos hace un año y nueve meses que visitamos la Playa Caribe.

Lamentablemente, a pesar de que es evidente que la playa es ruda y que tiene un oleaje muy fuerte, no hay salvavidas. Sólo hay este letrero con la consabida advertencia.

A pesar de esa advertencia y de mi temor a bañarme en esta costa, recientemente debí acudir allí en trabajo voluntario de la empresa donde laboro y esta vez no dudé en lanzarme a la orilla y disfrutar por una hora y unos minutos de esta agua súper salada y que con sus olas sientes que recibes un masaje en el cuerpo cansado.

Admiré como una compañera de trabajo, que había entrado al agua con los jeans con que andaba, cómo le decía a otra que se bañara, ya que eso sería una historia que podría contar a sus hijos. "No esperes que digan, ella sólo vio a sus compañeros bañarse sin miedo a las olas o a mojarse la ropa que llevamos".

En ese momento yo había salido de la playa y ese discurso hizo envalentonarme nuevamente y volver a disfrutar del lleva y trae de las fuertes olas de la hermosa Playa Caribe.

Orilla de Playa Caribe

El lado derecho con acantilado

Y por cierto, el agua de coco no podía faltar, tanto para tomar su rica agua, como para llevarse un par de este fruto.

A pesar de que ese día se esperaba una tormenta en esa zona, sólo llovió por unos minutos.

Esta fue mi tercera visita a #PlayaCaribe y de seguro que no será la última. Me gusta que van pocas personas y uno puede aprender a cómo bañarse y divertirse con precaución en este hermoso litoral del #EsteRD.